Todos los veranos renovamos algo en casa dentro de nuestras posibilidades. En este tiempo hemos actualizado nuestro cabecero, hemos pintado el mueble del salón, también hemos decorado el taburete de Ikea... y si quieres alguna más en la sección de Crear puedes nutrirte de nuestras ideas.
Este 2020 ha tocado cambiar el horrible suelo de la cocina; y es que era terriblemente sucio y tenerlo decente suponía fregarlo a diario. Así que hoy te cuento cómo lo hizo mylove, porque aquí todo el mérito es suyo.
1._ Elegir el suelo
En este aspecto te tienes que documentar un poquito porque según la habitación que elijas y el uso que le des necesitarás mayor resistencia. No me voy a extender en este paso porque cada uno tendrá sus necesidades; yo sí te digo que nosotros optamos por el suelo vinílico que se pega directamente y escogimos uno de gran dureza al tratarse de la cocina y con el tute que ello conlleva.
2._ Manos a la obra
Antes de ponerte con ello deberás dar la noche anterior una capa de imprimación lo que va a permitir que el suelo se agarre mejor y no haya diferencias.
3._ Empieza por el centro de la cocina y a partir de ese punto continúa completando todo el espacio.
4._ ¿Se tienen que mover los muebles?
Evidentemente si queremos dejarlo bien deberemos mover los muebles de la cocina para llegar hasta el final. La mayor parte de ellos van con patas regulables por lo que no existirá problema para devolverlo a su sitio.
5._ ¿Se pueden cortar las tablas?
Sí, con un cuter podrás darles la forma que necesites para completar todo el suelo.
En el caso de que haya diferencias de altura en tu suelo original que no se hayan podido solventar con la imprimación, ten cerca el pegamento de "No más clavos" para poder dejarlo alineado.
6._ ¿Y la puerta?
Para la puerta deberás comprar unas pequeñas arandelas que hagan que la misma esté un poco más elevada teniendo en cuenta que tu suelo habrá crecido unos tres milímetros.
7._ Acabado
Para finalizar sella todo el perímetro con silicona de un color similar y siéntete orgullos@ de tu trabajo.
¿Qué te parece? ¿Te animas con la idea de disfrutar con un suelo vinílico en la cocina?
María P.