Son muchas las ocasiones en las que te animo a salir al campo, respirar aire puro y disfrutar. Pues en una de esas excursiones se me ocurrió coger palos con los peques para hacer nuestro árbol de Navidad DIY.
Sinceramente, no será el árbol más bonito que encuentres (las fotos no le hacen justicia :) pero será del que más orgullos@ estarás porque será creado por tus pequeños. Es muy sencillo y puede ser un buen plan de Adviento.
Materiales.
- Palos de diferentes medidas para hacer la forma del pino
- Cuerda de yute o similar
- Lija
- Pintura chalk paint
- Luces y decoración.
Lo primero de todo es lijar un poco los palos, no lleva mucho tiempo, con unas pocas pasadas es suficiente. No queremos que pierdan sus rasgos de naturaleza pero es bueno pasar la lija para quitar el polvo y alguna cosita que no queramos quedarnos.
Después es buena idea pintarlo con ChalkPaint, ya sabes, la pintura que no necesita tratamiento de la superficie y que cubre muy bien. Mi idea era hacerlo en blanco pero mis salvajitos decidieron que el turquesa era un color mucho más acertado. También puedes dejarlo sin pintar.
Una vez secos los palos solo quedará unirlos de mayor a menor, para ello con una cuerda bonita podrás hacerlo enrollando en el mismo palo y pasando al siguiente.
Ahora ya sólo queda decorarlo con aquello que te guste y añadirle unas luces para que cuando se haga de noche ilumine como se merece.
¿No me digas que no es fácil? Te aseguro que tus pequeños se sentirán muy orgullosos del árbol de estas Navidades.
María P.