Hay muchos sitios en Madrid que se merecen una visita y el pueblo de Patones de Arriba es uno de ellos. Patones es famoso por sus casas de pizarra negra y por las ruina de su monte con antiguas chozas de sus pastores. Pero además de todo esto Patones es un pueblo que merece un paseo por sus calles, tranquilo, disfrutando y respirando su belleza.
Nosotros hemos aprovechado estos días de Navidad para visitarlo pero es precioso en cualquier época del año.
Además en su oficina de turismo que es la antigua iglesia puedes solicitar un plano para los más pequeños, así podrán recorrer todo el pueblo para descubrir entre otras cosas, una lavadora de hace más de 100 años, la casa de los gatos o la misteriosa casa del gnomo.
Lo cierto es que lo del plano es todo un acierto porque les mantendrá entretenidos sin tener que aguantar quejas por alguna de sus cuestas.
Comer allí desde luego es cita obligada, hay un montón de sitios pero es muy recomendable reservar con antelación.
También te recomiendo ir prontito, porque aparcar allí es un poco la jungla y de no ir pronto a lo mejor os toca andar más de la cuenta.
Así que aquí te dejo una idea para tu próxima escapada y volver a enamorarte.
María P.