Estrellas sin luna

  Me apetece tener un espacio donde contarte cosas diferentes, como mi opinión sobre un tema de actualidad, mis reflexiones sobre sostenibilidad o como hoy, contándote como un libro me ha marcado.  No sé cada cuanto publicaré estas conversaciones conmigo misma, hasta donde me mojaré o si se quedará en una única entrada; pero al menos hoy empezamos. Poco a poco han ido cambiando muchas cosas en mi vida, estos últimos tres años han sido un poco combulsos pero he procurado mantenerme serena ante las sorpresas y las adversidades.  Ha habido varios libros que me han hecho reflexionar, replantearme mi vida o mi forma de ser y han conseguido que lleve a cabo cambios que no entraban en mis planes. Ví recomendado el libro de Goodbye, things en alguna cuenta de Instagram que ahora no recuerdo, busqué en mi biblioteca si lo tenían y lo traje a casa con la idea de ojearlo sin entrar en profundidad en los detalles.  Pero los planes que el libro tenía para mí fueron diferentes.     

  La idea que te traigo es muy rápida, me encanta y se le ocurrió a mylove.   Siempre me ha hecho gracia en esas películas americanas cuando el hijo/a vuelve a la casa donde se crió y ve en el marco de la puerta de la cocina las muescas que hacían sus padres para medirle junto a sus hermanos. Nosotros lo teníamos con un poster cutrecillo de una tienda de juguetes en la entrada de casa y claro no era lo mismo.  Hasta que mylove fue consciente que el sitio ideal era el hueco de pared que quedaba entre las puertas de las habitaciones de nuestros salvajitos , de manera que en cada puerta apuntamos como van creciendo. La forma de hacerlo es súpersencilla, nosotros recurrimos a goma eva de colores para que fuese un poco más divertido y luego ya es armarte de paciencia e ir marcando los centímetros en las diferentes piezas.  Recuerda tener en cuenta los centímetros del rodapié. Ya solo te queda coger un boli de los que no se borran e ir marcando la evolución de tus pequeños. Espero que te hay

  En la última edición de La Feria del Libro acudimos a la presentación del libro "De niñas a Leyendas" donde se contaba la historia de como nació este obra.  Alejandra creció queriendo hacer todos los deportes, fútbol, kárate, correr... mientras el resto se preguntaba por qué con su edad no jugaba con muñecas. A los cuatro años habló con su madre y le confesó que ella nunca conseguiría jugar al fútbol como los chicos de su clase.  Una alarma resonó en la cabeza de su mamá y se dió cuenta de que Álex no tenía referentes femeninos en el deporte que la llevasen a querer seguir esforzándose a pensar que tal vez podría conseguirlo.

  No sé tú, pero a mí es llegar el frío, estar más tiempo en casa y entrarme muchas ganas de crear con mis manos.  Apetece aprender cosas nuevas.  Hoy te cuento esas cosas que quiero aprender.

  Si algo me ha traido la maternidad es un enorme interés por seguir aprendiendo y mejorar cada día un poco más en ser la mejor versión de mi misma. Descubrí el libro de "El cerebro del niño explicado a los padres" cuando escuché a su autor (Álvaro Bilbao) en un podcast.  Tuve curiosidad en indagar más, me lo compré, lo leí y puedo asegurar que si tienes hijos/as, trabajas con niños/as o similar este libro es fundamental para tu vida. Si me sigues habrás visto que no es la primera incursión que hago sobre la neuroeducación y temas similares y siempre me quejaba de lo mismo: mucha teoría y poca práctica. Pero por fin he encontrado un libro que te trae casos reales, que te ayuda a encontrar soluciones a esos problemas que a todos se nos plantean en nuestro día a día con los hijos/as. Me ha encantado leerlo porque he encontrado razones a cosas que hacía por puro instinto y también me ha enseñado a que no pasa nada si no llegas a todo, que lo verdaderamente importante es que tu

  El verano sigue siendo una época muy fructífera para mi lectura y creo que es el agua lo que me hace sentarme a pasar las hojas de un libro.  Pero si hay un lugar ideal, ese es la playa, el sonido de las olas es la mejor banda sonora, haciendo a libros buenos, maravillosos.  Entre mis lecturas preferidas siempre encuentras granitos de arena de playa.

  En verano nos gusta acudir a visitar museos por Madrid, es un buen plan teniendo en cuenta que allí se suele estar fresquito y hay poca gente.  Uno de los pendientes era el Museo Lázaro Galdiano donde podrás entrar en su palacete para descubrir una maravillosa colección de pinturas, esculturas, marfiles, relojes, armas, armaduras... por sus cuatro plantas.