Hay lugares que cuando se habla de ellos es en mayúsculas y luego cuando acudes a verlos te parece que si no fuese porque está lleno de gente es probable que para ti hubiese pasado de largo. En las Lagunas de Ruidera me ocurrió justo lo contrario, vuelvo enamorada del lugar.
A algo más de dos horas de Madrid puedes venir a descubrir (si no lo has hecho ya) un impresionante fin de semana. Con todas las personas que he hablado de esta escapada, que han sido muchas, me han dicho que ellos fueron de pequeños y que ahora está muy diferente, mejor. Yo solo tengo la última versión y me parece un sitio espectacular.
Este lugar se trata de un Parque Natural situado en el valle de Alto Guadiana en Castilla la Mancha, entre las provincias de Albacete y Ciudad Real. Es un espacio de unos 30 kilómetros con 15 lagunas y el nacimiento del río Guadiana. Las quince lagunas se inundan unas a otras formando cascadas y saltos de agua. El más impresionante se encuentra en el pueblo de Ruidera y se llama El Hundimiento.
Imagino que en todas sus épocas tendrá su encanto; nosotros lo hicimos en el puente de Mayo y todo estaba precioso con muchísima agua y un montón de cascadas. Una de las cosas a tener en cuenta es que para poder disfrutar de las lagunas es bueno tener coche para poder desplazarte a visitar los distintos sitios.En muchas de ellas hay lugares donde está permitido el baño, todas son preciosas para darse un chapuzón en sus aguas cristalinas y rodeado de ese entorno. A lo largo de las mismas hay un montón de restaurantes donde disfrutar de la gastronomía manchega a las vistas de las Lagunas. Nosotros comimos en el Café Bar La Lengua frente a la laguna del mismo nombre y todo fenomenal. Otro lugar que visitamos y que te soprenderá por su terraza es El Garijo es un sitio con mucho encanto. Aquí no comimos así que tampoco puedo decir mucho.
Además en esta zona hay muchas rutas para hacer que seguro se adaptan a tus necesidades.
Hablar de Castilla La Mancha es recordar a Don Quijote por eso otro de los sitios que te recomiendo visitar es La Cueva de Montesinos. Actualmente sólo se puede pasar con visita guiada y ya te digo que a los salvajitos les flipará eso de ir con el casco y la linterna incorporada entrando en una cueva.Lo mejor fueron las explicaciones y las muchas curiosidades que nos contaron de este lugar y que es lo que debió ver Cervantes cuando estuvo allí para luego recrearlo en el libro de Don Quijote de la Mancha. Mi recomendación es que si puedes cojas la primera hora de visita.
Otra visita interesante es el increíble castillo de Peñarroya.
Y de regreso a Madrid si puedes para en el pueblo de Consuegra para conocer de cerca sus molinos de viento y sentirte Don Quijote por un rato. En el castillo de Consuegra se hacen visitas teatralizadas a las que no pudimos apuntarnos porque queríamos volver prontito a casa pero que seguro volveremos.
Y hasta aquí nuestra escapada manchega que espero que te haya gustado.
María P.