Durante la Semana Santa de este año decidimos visitar Grefa, se encuentra en Majadahonda dentro del Monte del Pilar. Esta visita no está colgada en mi cuenta Instagram porque hay veces que un Reel o una breve historia no permite expresar todo lo vivido y puede llegar a confundir. Por eso me alegro de mantener vivo el blog y poder dejar por aquí la experiencia.
Grefa son las siglas de Grupo de Rehabilitación de la Fauna Autóctona y su Hábitat, es una ONG que se mantiene gracias a las aportaciones de muchos particulares y algunas empresas, el maravilloso trabajo de voluntarios y lo recaudado también en estas visitas.
La visita a sus instalaciones es de apróximadamente 3 horas en las que aprenderás muchísimo y desde el inicio te explican que no has acudido a un zoo. Es importante saber que para niños muy pequeños puede resultar aburrido si previamente no les hemos explicado a que lugar acudimos.
Nuestro guía fue Alberto y reconozco que las tres horas se nos pasaron en menos tiempo gracias a todas las explicaciones y anécdotas que nos contó. En la visita podrás conocer cúal es su trabajo, visitar el Hospital desde el exterior y en el caso de que haya algún animal te expliquen brevemente que es lo que están haciendo.
Podrás ver muy de cerca a los buitres y maravillarte de su embergadura. La filosofía de GREFA es recuperar a los animales y devolverles a su hábitat natural por eso los que allí se encuentran son porque no pueden ser liberados ya que tienen algún tipo de impedimento o bien se están recuperando.
También podrás acudir a ver las águilas y saber las características de cada especie, visitar los galapágos y tortugas. También podrás conocer la cigüeña negra que no tenía ni idea que existía o ver en el nursery os animales que han quedado huérfanos y deben alimentar.
Me encantó la visita porque hacen concienciación de lo peligroso de los caprichos que a veces se hacen grandes como en el caso de una mascota o la idea de tener un olivo centenario recorriendo miles de kilometros para que tenga habitantes que afecten al hábitat de su nuevo lugar.
Te explica que tenemos que aprender a convivir porque es verdad que a veces los humanos nos creemos que el mundo es nuestro y jugamos a ser Dios. Los pesticidas, venenos y la caza sin control hace que cometamos errores que nos afecten en nuestra propia salud.
Por eso hoy te recomiendo la visita de GREFA con tus hijos si crees que les gustará porque más que ver animales enjaulados es una lección medioambiental que nos viene bien a todos y descubrir la pasión y entrega de sus voluntarios te reconforta.
Por último contarte que actualmente la visita cuesta 3€ por persona y que hay que reservar previamente; te recomiendo hacerlo con tiempo.
María P.