Mucho he tardado en traer a mis salvajitos a conocer Chinchón y eso que es un sitio que me trae muy buenos recuerdos de juventud y de muchas risas.
Chinchón pertenece a Madrid y en unos 40 minutos pasas del centro de la ciudad a un pueblo que mantiene la tradición, eso es lo que más me gusta de Chinchón que con el paso de los años ha sabido mantener todas esas características que le hacen especial.
Es un lugar genial para visitar con niños porque es fácil de recorrer y está lleno de cosas para disfrutar. En esta primera visita nosotros decidimos conocerlo por nuestra parte pero hay posibilidad de visitas guiadas, que nosotros aprovecharemos para hacer en nuestra siguiente visita.
El paseo por sus calles ya es maravilloso, pero sería pecado perderse su lugar más emblemático; su plaza, con el interior de arena, convirtiéndose durante sus fiestas patronales en plaza de toros.
En la misma plaza se encuentra la oficina de turismo y en la parte trasera podrás encontrar el antiguo lavadero donde en sus paredes te cuenta la tradición del pueblo y sus productos más típicos que no puedes perderte.
Nosotros no pudimos escapar a la compra de los ajos y algunos de sus dulces en esas panaderías de antaño donde todo huele bien.
Si quieres pasar el día en Chinchón y aprovechar para comer te recomiendo reservar con tiempo porque a la hora de la comida los fines de semana el pueblo se llena.
Subiendo a la Torre del Reloj podrás encontrar un maravilloso mirador desde donde contemplar su plaza desde arriba y allí mismo podrás visitar la Iglesia de la Asunción donde se encuentra una obra de Goya solicitada por el capellán de la iglesia que era su propio hermano.
Regresando a la plaza a partir de las 12h más o menos vienen unos burritos para el disfrute de los niños y en los que ellos pueden aprovechar a dar una vuelta.
Nosotros elegimos la opción del tren turístico para conocer todo el pueblo y ver El Convento de la Clarisas que tiene visitas guiadas y en el que puedes aprovechar para comprar alguno de sus dulces o si eres un apasionado del vino también recomiendan la visita a la bodega del Nero.
Si se os queda corta la visita puedes conocer el Museto etnológico "La posada" ubicado en una antigua posada de Chinchón con una exposición de máquinas y herramientas con las que se trabajaba en el campo.
El punto a mejorar es el Castillo de Chinchón que está en muy mal estado de conservación y me parece un pena; pero aún así es un lugar maravillos para parsar el día y seguir disfrutando de Madrid.
María P.